Tu Salud Espiritual | Disfrutando La Vida Diaria

• Todos digan enteramente. Sí. Bueno, la palabra es enteramente les haga enteramente consagrados a Dios y que su espíritu y su alma y su cuerpo, su espíritu, su alma y su cuerpo sean preservados sanos y completamente hallados, irreprensibles en la venida de nuestros nuestro Señor Jesucristo, el Mesías.
• Ahora, usted es un espíritu, tiene un alma y vive en un cuerpo. Una de las funciones de su espíritu es su conciencia. Su espíritu es donde recibe revelación, es donde oye a Dios. Su alma es su mente, su voluntad, sus emociones, todas son partes muy importantes de su ser. Y vea, está su cuerpo, la casa en la que se desplaza. Y todo eso es importante para Dios.
• Pienso que muy a menudo pensamos que él solo está interesado en el espíritu y en las partes espirituales de nuestras vidas y las denominadas actividades espirituales en que participamos. Pero en la actualidad Dios está interesado y le concierne cada área de nuestra vida. No hay nada acerca de uno que no le interese a Dios.
• Dije que no hay nada acerca de uno que no le interese a Dios. Él está interesado en todo lo que se refiere a uno, cada cosita. Y él quiere que todo su ser, cada parte de usted esté entero, sano, porque en realidad, para ser honesta, puede haber una área que esté bien y dos o tres otras áreas que estén hechas un lío y así no vamos a disfrutar la vida.
• Amén. Mire, usted puede decir que se siente bien físicamente, pero si aún le duele y está herido por cosas que le pasaron en su niñez y anda enojado todo el tiempo, realmente no tiene una vida y podemos estar bien espiritualmente, quizás hemos nacido de nuevo, vamos al cielo, pero Dios quiere más que eso para usted.
• Voy a decir algo que es un poco sorprendente. Yo no pienso que Jesús vino solo para llevarnos al cielo. Yo no pienso que solo vino para eso. Y en serio lo digo, es la parte más importante, pero él quiere que disfrutemos la jornada. Él dijo, “Yo vine para que puedan tener y disfrutar su vida y que la tengan en abundancia, a plenitud, hasta que repose ahora.
• Estuve en la iglesia por mucho, mucho tiempo antes de aprender algo distinto a las cosas espirituales de la vida. Yo aprendí todas las doctrinas de la iglesia. Yo seguí las instrucciones de la iglesia. Había nacido de nuevo. Había recibido a Cristo como mi salvador. Oré para que mis pecados fueran perdonados.
• Yo sabía que yo iba al cielo, pero una que otra área de mí era algún lío. Yo lucía por afuera como que todo estaba bien, pero había muchas cosas sucediendo por dentro de las que nadie sabía. Y lo triste es que yo no puedo recordar en esos años jamás haber oído un mensaje de mis pensamientos. No recuerdo jamás haber oído un mensaje de mis emociones.
• ¿Cuántos pueden dar testimonio de eso? Fue a la iglesia mucho, mucho tiempo, quizás y nunca oyó ninguna de las cosas que le iban a ayudar en su vida práctica y diaria. Amaba a Dios, pero no amaba su vida. Y yo solo quiero ser bien clara hoy para los que están aquí, los que nos ven por televisión, de que Jesús vino para hacernos enteros y completos.