¿Cómo Recuperar La Pasión Por Dios ¡Necesitas Ver Este Mensaje
Su consulta anterior solicitaba reescribir un resumen sobre “La elección de Judas”, sin embargo, las fuentes proporcionadas en esta ocasión se centran en La Palabra de Dios y la recuperación de la pasión espiritual. Procederé a reescribir y resumir los puntos clave de este nuevo material según estándares de SEO en español.
La Palabra de Dios: Claves para Recuperar la Pasión Espiritual, Entender y Vivir la Verdad Eterna
Introducción: La Necesidad de Afrontar la Verdad
El conocimiento de la verdad es lo que transforma la vida. Muchas personas hoy son cobardes para enfrentar la verdad o perezosas para aceptar solo medias verdades. Se cree que “no somos lo que pensamos que somos, sino más bien lo que pensamos, eso somos”. Si el conocimiento es poder, se necesita el conocimiento de la Palabra de Dios para obtener poder espiritual. Debemos ser moldeados, motivados y dirigidos por la Palabra de Dios.
A pesar de su importancia, para muchos creyentes, la Biblia permanece como un libro cerrado y misterioso. Entender la Biblia no tiene atajos ni formas mágicas; es difícil, pero satisfactorio y desafiante.
Para que la Palabra de Dios infle su corazón, su mente y su vida, usted debe practicar tres cosas diligentemente: Apreciar sus Virtudes, Asimilar su Vitalidad y Practicarla.
1. Apreciar las Virtudes de la Palabra de Dios
Si no apreciamos el gran valor y virtud de la Palabra de Dios, no tendremos ningún deseo de conocerla o aprenderla.
La Biblia es Eterna e Indestructible
La Palabra de Dios debe apreciarse porque es eterna. El Salmo 119:89 declara: “Para siempre, oh Jehová, permanece tu palabra en los cielos”. La Biblia no es el libro del mes o del año, sino el libro de todas las edades. Es el libro que no cambia y no puede cambiar porque es la Palabra de Dios.
La Biblia es actual, eterna e indestructible. La ciencia sigue avanzando y los imperios han desaparecido, pero la Biblia permanece firme a pesar de los ataques frontales de religiosos liberales y las burlas de agnósticos. Ni todos sus enemigos han podido rasgar su sagrada vestidura o diluir la miel de sus colmenas. Como dice 1 Pedro 1:25, “la palabra del Señor permanece para siempre”.
La Biblia es Verdad Absoluta
La Palabra de Dios es la verdad. En el Salmo 119:160, el salmista dice que “la suma de tu palabra es verdad”. En Juan 17, Jesús afirmó a su Padre: “Tu palabra es verdad”.
- Inspiración Divina: La Escritura es “inspirada por Dios” (2 Timoteo 3:16). Esto significa literalmente que es el aliento o respiración misma de Dios.
- Autoría de Dios: Dios es el autor de las Escrituras. Los hombres santos hablaron siendo inspirados por el Espíritu Santo (1 Pedro 1:21), escribiendo lo que Dios les dijo.
- Fiabilidad: En el Antiguo Testamento hay más de 3,800 frases como “así dice el Señor”. Si la Biblia no fuera la Palabra de Dios, sería el cúmulo de mentiras más grande sobre la Tierra, pero el Dios de la verdad no puede mentir.
La Biblia es un Tesoro
La Biblia es un libro que debe ser atesorado. Salmo 119:72 dice: “Mejor me es la ley de tu boca que millares de oro y plata”. Si le dieran a elegir entre todos los tesoros del mundo y la Palabra de Dios, se debe escoger la Palabra de Dios. Es el libro de los tesoros de Dios.
2. Asimilar la Vitalidad de la Palabra de Dios
Debemos asimilar la vitalidad de la Palabra de Dios porque es un libro vivo. Hebreos 4:12 establece: “Porque la palabra de Dios es viva y eficaz”. Jesús dijo que las palabras que Él ha hablado “son espíritu y son vida” (Juan 6:63).
Así como no solo se leen recetas, sino que se come lo preparado, se debe asimilar la Palabra de Dios a través de cinco pasos esenciales:
1. Ore: Pida a Dios que sea su Maestro
Usted debe orar diciendo: “Señor, Dios, sé mi maestro”. Cuando ora para entender la Palabra, suceden tres cosas:
- Ojos Abiertos: Dios quitará las escamas de sus ojos espirituales. El Salmo 119:18 pide: “Abre mis ojos, y miraré las maravillas de tu ley”. Jesús abrió el entendimiento de sus discípulos para que comprendieran las Escrituras (Lucas 24:45).
- Corazón Animado: Se debe pedir a Dios que mueva y anime el corazón, inclinándolo hacia los testimonios y no hacia la avaricia (Salmo 119:36).
- Mente Iluminada: Pida a Dios que le ayude a entender (Salmo 119:73).
2. Medite: Dedique Tiempo Exclusivo
La meditación requiere tiempo. El Salmista se anticipaba al alba para clamar y esperar en la Palabra de Dios, y se anticipaba a las vigilias de la noche para meditar en sus mandatos (Salmo 119:147, 148).
3. Tome Notas: Fortalezca la Memoria
Al leer y meditar, tenga un cuaderno y lápiz. Espere que Dios le hable y anótelo, pues “la tinta más débil es mejor que una buena memoria”. La mente, que es como un cofre precioso, debe ser llenada con la Palabra de Dios en lugar de “basura”. La mente es como un jardín que debe ser cultivado, eliminando la “hierba mala”.
4. Use Sentido Común Santificado
Al leer, evite saltar de un lado a otro o empezar a mitad de un libro. Dios le dio una mente (y los creyentes tienen la mente de Cristo), así que úsela para estudiar.
- Diferencie Géneros: La Biblia tiene varias formas literarias (poesía, profecía, preceptos, promesas, proverbios). Un proverbio es un principio general que usualmente aplica para mejores resultados, pero no es una promesa.
- Interpretación: La Biblia debe interpretarse literal y figurativamente. Cuando encuentre un símbolo (como el dragón en Apocalipsis que simboliza al diablo, o las estrellas que simbolizan a los ángeles caídos), debe descubrir lo que el símbolo representa y luego creerlo literalmente.
5. Hágase Preguntas Específicas
Al leer, hágase estas seis preguntas:
- ¿Hay una promesa que reclamar?
- ¿Hay una lección que aprender?
- ¿Hay una bendición para regocijarse?
- ¿Hay un mandamiento que obedecer?
- ¿Hay un pecado que evitar? (Para no pecar contra Dios, guarde sus dichos en su corazón, Salmo 119:11).
- ¿Hay un nuevo pensamiento que debo llevar?