The Conquest – Acts 4:1-20 (Q1780)
Este resumen conciso y reescrito, optimizado bajo la premisa de los estándares de SEO en español, aborda la verdad central del cristianismo —la resurrección de Jesucristo— y las implicaciones directas que esta victoria tiene en la vida del creyente, incluyendo la persecución inevitable y el poder innegable de la predicación.
Las Mejores Noticias: El Gran Escape de la Tumba
El ministerio “El Amor Que Vale” del Dr. Adrián Rogers proclama las buenas nuevas de que Jesucristo es el amor más grande. Las mejores noticias que el mundo ha escuchado provienen de un cementerio en Jerusalén: “Él no está aquí; él ha resucitado”.
La resurrección de Jesús es el “gran escape”. A diferencia de hombres talentosos como Harry Houdini, un artista del escape que podía fugarse de cualquier prisión, celda o ataúd, Houdini finalmente murió sin poder escapar de su propia tumba. Jesús, en cambio, llevó a cabo el verdadero gran escape, resucitando de la tumba. El estudiante de una profesora corrigió su tarea al afirmar que Jesús es el hombre más importante que vive hoy, porque “Él está vivo, él está vivo”; otros mueren y permanecen muertos, pero Jesús murió y resucitó.
La verdad central de la Pascua es que Jesús no está muerto, sino vivo. “Yo soy el que vivo por los siglos de los siglos”.
Cinco Hechos Irrefutables Porque Él Vive
El poder de la iglesia primitiva, como se registra en Hechos capítulo 4, se debe a que Jesús vive. El Dr. Rogers destaca cinco hechos reales que persisten porque Cristo resucitó:
1. Su Persecución Continúa (Hechos 4:1-3)
El primer hecho de la resurrección es que Su persecución continúa. Jesucristo está vivo y aún sigue siendo perseguido.
- El Objetivo Real: En Hechos 4, los líderes religiosos (sacerdotes, jefe de la guardia del templo y saduceos) estaban resentidos porque se anunciaba en Jesús la resurrección de entre los muertos. Aunque perseguían a los apóstoles, en el sentido real, estaban persiguiendo al Señor Jesús. Los apóstoles eran solo las manos y los pies del Señor Jesús, Su nuevo cuerpo, llamado la Iglesia.
- El Enfrentamiento Directo: Jesús mismo lo aclaró al apóstol Pablo camino a Damasco: “Yo soy Jesús a quien tú persigues“. Si usted persigue a la iglesia, usted persigue a Jesús.
- La Causa del Odio: El mundo no persigue al “niñito Jesús” de la Navidad, ni al Jesús que sanó a los enfermos. El Jesús que el mundo no puede tolerar es el Jesús viviente que vino a destruir las obras del diablo. Es el Cristo que está en contra de la violación, el asesinato, la codicia, el orgullo, el aborto, la sodomía y el racismo. Es el Jesús que declaró: “Yo soy el camino y la verdad y la vida; nadie viene al Padre sino por mí”.
- La Insignia de Honor: Si usted no sufre ninguna persecución, no presuma de ello, porque la Biblia dice: “Y también todos los que quieren vivir piadosamente en Cristo Jesús padecerán persecución”. Si la persecución cesa, no es porque el mundo se haya hecho más eclesiástico, sino porque la iglesia se ha hecho más mundana. El creyente debe lucir esa persecución como una insignia de honor.
2. Su Predicación Convence (Hechos 4:4)
El segundo hecho es que Su predicación convence. En la predicación de los apóstoles, muchos de los que habían oído la Palabra creyeron, y el número de los varones era como 5,000.
- El Poder No Humano: Los apóstoles, siendo pescadores sin educación, no dependían de su habilidad de oratoria, lógica o carisma. Lo que convenció a la gente fue la presencia del Cristo viviente dentro de ellos.
- La Necesidad del Encuentro: La fe no se basa en la persuasión humana. Si once apóstoles que vieron a Jesús no pudieron convencer a Tomás, la persuasión es inútil. Lo que convenció a Tomás fue un encuentro con el Señor viviente. Hoy, la gente necesita un encuentro con el Cristo vivo, no con la iglesia, los coros o el predicador.
- Contraste con Líderes Muertos: Los líderes humanos (como Lenin) mueren y permanecen muertos. El epitafio de Lenin, que lo llamaba “el salvador del mundo” y “el líder más grande de todas las masas,” estaba todo en tiempo pasado. En contraste, Jesús dijo: “Yo soy el que vivo”.
3. Su Poder Confronta (Hechos 4:10, 14)
La resurrección significa que Su poder confronta. El milagro de la sanidad del hombre cojo que se paró junto a Pedro y Juan confrontó a los líderes religiosos.
- La Evidencia Innegable: Los líderes religiosos conferenciaban entre sí, diciendo: “¿Qué haremos con estos hombres? porque de cierto señal manifiesta ha sido hecha por ellos notoria a todos los que moran en Jerusalén y no lo podemos negar”. El poder de Jesús es real en el mundo hoy.
- La Fuente del Poder: Pedro rehusó tomar crédito por la sanidad, atribuyéndola al nombre de Jesucristo de Nazaret, a quien ellos crucificaron y a quien Dios resucitó de los muertos.