Sabiduría en medio de las pruebas
El mensaje del Dr. Charles Stanley, presentado por Ministerios En Contacto, aborda la realidad inevitable de las pruebas y dificultades en la vida. Este sermón, titulado “Sabiduría en medio de las pruebas,” busca ofrecer una respuesta clara a la pregunta recurrente: “¿Por qué me ha pasado esto a mí?”.
Stanley enfatiza que, aunque el deseo natural es buscar una salida rápida del dolor, el sufrimiento, la decepción o la desesperanza, Dios tiene un objetivo mucho más importante que simplemente liberarnos de la dificultad. El propósito de la enseñanza es guiar a los creyentes a beneficiarse de sus dificultades en lugar de volverse amargados, resentidos u hostiles hacia Dios.
El Fundamento Bíblico de la Esperanza Inmutable
El Dr. Stanley recurre a la Primera Epístola de Pedro, específicamente a los primeros versículos del capítulo 1, donde el apóstol escribe a creyentes que están pasando por momentos difíciles y son perseguidos a causa de su devoción al Señor Jesucristo.
Pedro ofrece una maravillosa respuesta a la aflicción. Él comienza bendiciendo a Dios por Su grande misericordia, la cual nos hizo renacer para una esperanza viva mediante la resurrección de Jesucristo. Esta esperanza viva nos asegura una herencia incorruptible, incontaminada e inmarcesible reservada en los cielos.
Los creyentes son guardados por el poder de Dios mediante la fe para alcanzar la salvación. Aunque los creyentes deban ser afligidos en diversas pruebas por “un poco de tiempo, si es necesario”, Pedro declara que deben alegrarse con gozo inefable y glorioso.
El mensaje central de Stanley es que, para Dios, es más importante que aprendamos algo y nos beneficiemos de la prueba que simplemente eliminar la adversidad, el dolor o el sufrimiento. Una persona sabia no desea pasar por el sufrimiento y salir vacía, desalentada o desamparada.
Discerniendo el Origen y la Meta de las Pruebas
Es crucial para el creyente tener sabiduría para discernir el origen de las pruebas. No siempre es fácil distinguir si el dolor es algo que Dios manda, algo que causa el diablo, o algo que causamos nosotros mismos.
Sin embargo, Stanley recuerda una verdad fundamental para los hijos de Dios: Nada puede tocar a un hijo de Dios si Él no lo permite. Los creyentes están bajo la protección divina, y cualquier cosa que les llegue tiene que pasar por Dios todopoderoso.
Por lo tanto, más allá del origen inmediato, la pregunta clave es: “Señor, ¿cuál es tu meta para mi dolor, mi sufrimiento, mi pena?”. El creyente debe confiar en que, si Dios lo permite, Él está haciendo algo bueno.
6 Propósitos Divinos de las Pruebas
El Dr. Stanley identifica varios propósitos de sabiduría por los cuales Dios permite las pruebas en la vida del creyente:
1. Fortalecer y Aprobar Nuestra Fe
El propósito principal, según 1 Pedro 1, es que nuestra fe sea sometida a prueba. La palabra “prueba” aquí significa ser “aprobada”. Dios busca que probemos que nuestra fe es fuerte. A los ojos de Dios, nuestra fe es mucho más valiosa que el oro perecedero. Las pruebas sirven para que Dios fortalezca nuestra fe, ya que la fe es uno de nuestros mayores recursos y no sabremos cuánta fe tenemos hasta que sea probada. Al perseverar sin amargura, nuestra fe crece.
2. Probar Nuestra Devoción
Las pruebas sirven para probar nuestra devoción. Permiten que el creyente descubra si ama a Dios solo cuando las cosas van bien, o si puede decir sinceramente: “En verdad, te amo, Señor” incluso al sufrir más de lo que cree poder resistir.
3. Purificar Nuestra Vida
El dolor tiene un factor purificante. Las pruebas alcanzan el fondo del alma y del espíritu, revelando nuestra propia realidad y verdad. Mucha gente prolonga su sufrimiento porque no reconoce que Dios está en el proceso de purificar sus vidas y confrontar lo que está pasando en su espíritu y corazón.
4. Revelar el Poder de Dios
Dios toma la oportunidad de las pruebas para revelarse con poder en nuestra vida. Cuando el creyente se pregunta cómo podrá manejar la situación, Dios interviene y demuestra Su grandioso poder. Dios no permite estas cosas sin un fin específico.
5. Desarrollar el Carácter de Cristo
Un propósito esencial de las pruebas es desarrollar el carácter de Cristo en nuestra vida. El desarrollo del carácter se evidencia, por ejemplo, en la disposición a pedir perdón si hemos hecho daño a alguien.
6. Equiparnos para Consolar a Otros
Una de las razones principales por las cuales Dios permite tribulaciones es para equiparnos para ayudar a otros que pasen por dificultades similares. Dios, quien es Padre de misericordias y Dios de toda consolación, nos consuela en nuestras tribulaciones para que podamos consolar a otros. Al haber pasado por el dolor, la desilusión o la pena, el creyente puede decirle a alguien que sufre: “He pasado por eso”. Este entrenamiento de Dios nos permite sentir lo que siente la otra persona.