No más excusas
La vida cristiana victoriosa exige un cambio de mentalidad radical: pasar de la justificación (excusa) a la acción de fe. El pastor Joel Osteen afirma que la costumbre de inventar excusas—ya sea por desilusiones, adversidades, o la falta de recursos—es la muleta que impide al creyente avanzar hacia el destino y las bendiciones que Dios ha preparado. Mientras se inventan excusas, se justifica el estancamiento.
Este resumen aborda la estrategia bíblica para desechar las excusas limitantes y activar el potencial que Dios ya ha depositado en el creyente.
1. El Engaño de la Excusa: ¿Por Qué Nos Retienen?
Las excusas son razones que nos damos para conformarnos con menos de lo mejor de Dios. Permiten justificar la infelicidad, la mediocridad, la amargura, el resentimiento y el estancamiento.
A. La Culpa No es Solución
Es fácil buscar una excusa para cualquier cosa:
- Culpando a Otros: El tráfico, un jefe grosero, un colega que excluyó, personas que lastimaron, no cumplieron su palabra o traicionaron.
- Culpando al Pasado: Una mala infancia, la pérdida de un ser amado o una ruptura.
- Culpando a la Genética o Circunstancia: “No puedo bajar de peso, mi metabolismo es lento”. “No puedo vencer esta adicción, está en mis genes”.
La verdad es que, aunque el pasado pueda ser una excusa válida porque no fue justo (desilusión, enfermedad, traición), culpar al pasado o a otros nos detiene. Si se mantiene culpando, se detendrá.
B. El Diablo y la Muleta de la Autocompasión
Joel Osteen ilustra que el diablo nos tienta a buscar excusas. Es fácil culpar a los padres o a otros por nuestras desventajas.
- La Muleta: Las excusas se vuelven una muleta que utilizamos para justificar por qué no estamos donde deberíamos.
- El Peligro de Cojear: La tragedia es que, al usar la muleta de la autocompasión o la inferioridad, pasamos la vida “cojeando”. Dios, sin embargo, nos creó para correr.
2. Estrategias para Desechar las Excusas y Avanzar
El primer paso para la promoción y para ver el favor de Dios es desechar la bolsa de excusas.
A. Cero Excusas para la Infelicidad y Mediocridad
Se debe tomar una actitud firme y declarar: “No más excusas”.
- Gozo Activo: Decida disfrutar el día a pesar de lo que suceda, pues el día es un regalo de Dios.
- Perseguir Sueños: En lugar de excusar la mediocridad, decida perseguir sus sueños, vencer obstáculos y romper malos hábitos.
- Identidad de Hijo del Altísimo: No más excusas para sentirse inferior. El creyente debe saber que es hijo del Dios altísimo.
B. La Mentira de la Inadecuación y la Limitación
Las excusas a menudo provienen de un sentimiento de inferioridad o limitación.
- No Necesita lo que No Recibió: La clave es: si usted no recibió el talento, la apariencia o la personalidad que tienen otros, “entonces no lo necesita”. Usted tiene exactamente lo que necesita.
- Usted es Suficiente: Las excusas de “no estoy calificado,” “no tengo ese talento,” “mi voz no es fuerte,” o “soy muy viejo/joven” deben ser desechadas.
- Avive la Grandeza Oculta: Dios ha puesto en usted potencial oculto y semillas de grandeza. Debe avivar lo que Dios puso en su interior y desechar las excusas antes de ver la promoción.
C. Abierto a lo Nuevo (Rompiendo el Viejo Hábito)
Las excusas nos mantienen detenidos, haciendo las cosas a la “manera antigua”.
- Aprender Algo Nuevo: No se deje convencer por el dicho de que “a perro viejo no se le enseña truco nuevo”. Si su perro interno cree que es “muy capaz, preparado y facultado”, aprenderá nuevos trucos.
- Ejemplo de Joel Osteen y Victoria: Joel Osteen usó la excusa de “no sé escribir a máquina” para no usar una computadora. Victoria lo confrontó con amor y verdad: “Puedes hacer cualquier cosa que te propongas”.
- Ejemplo de Mamá Osteen: Su madre, a los 81 años, envía mensajes de texto y aprende nuevas cosas, demostrando que la edad no es una limitación.
3. Superando la Adversidad y la Injusticia con Fe
La adversidad es parte de la vida, pero no debe convertirse en una excusa para desviarnos de nuestro destino.
A. La Adversidad No es un Accidente
La adversidad no es permitida por Dios para apartarlo de su destino.
- El Propósito de Dios se Manifiesta: El hombre ciego de nacimiento no nació así por culpa de él o sus padres, sino para que “la bondad de Dios pudiera ser manifestada en su vida”.
- Obrará a Favor: Si se mantiene en fe, la adversidad y la desventaja no obrarán en su contra, sino a su favor.
B. Dios es el Vindicador
Las heridas, las mentiras y las injusticias no tienen que controlar el resto de su vida.
- Dejar Ir el Daño: Si deja de revivir lo negativo y deja ir el daño, Dios peleará sus batallas y será su vindicador.
- José como Modelo: José, traicionado, encarcelado y acusado falsamente, no se aferró a las excusas. Él siguió avanzando y haciendo lo correcto, y al final, salió vindicado, promovido a un lugar de honor e influencia.
- La Corona por la Ceniza: Dios es un Dios de justicia que tomará el daño, le dará la vuelta y lo usará para su ventaja, dándole “una corona en vez de ceniza” y doble por la injusticia.