Es el debido tiempo
-
Dios le bendiga. Es siempre un gozo llegar hasta su hogar. Si se en nuestra área, por favor venga y participe en uno de nuestros servicios. Le prometo que lo haremos sentir en casa. Gracias por vernos hoy. De nuevo. Gracias por estar aquí. Me gusta empezar con algo gracioso.
-
Supe una pareja de ancianos casados por más de 60 años y en una convivencia en la iglesia les preguntaron el secreto de su éxito. Él dijo que siempre trataba a su esposa con respeto y la llevaba de viaje por todo el mundo. Dijo, “De hecho, para nuestro 25 aniversario de bodas la llevé a Beijín, China.” Todos aplaudieron amablemente.
-
Alguien preguntó, “¿Qué hizo para su aniversario de bodas?” dijo, “Yo regresé y la recogí.” Levante su Biblia, dígalo convicción. Esta es mi Biblia. Soy lo que dice que soy. Tengo lo que dice que tengo. Puedo hacer lo que dice que puedo hacer. Hoy recibiré la palabra de Dios. Confieso que mi mente está alerta, mi corazón está receptivo, nunca más seré igual en el nombre de Jesús. Dios le bendiga.
-
Quiero hablarle hoy de que es su debido tiempo. Todos tenemos cosas en las que creemos, sueños que queremos lograr, problemas que esperamos que se resuelvan. Quizás sea ver a nuestra familia restaurada, perder algo de peso, romper una adicción, empezar nuestro propio negocio. Pero a veces al pasar, mes tras mes, incluso año tras año, no vemos que nada cambie.
-
Es fácil desanimarse, pensar, nunca va a suceder, no llegar a ser mejor, aprender a vivir con esto. Y aunque es bueno tener contentamiento donde estamos, no deberíamos perder la expectación. Solo porque no ha pasado aún, no significa que no va a suceder. Siempre habrá fuerzas tratando de convencernos, de adaptarnos donde estamos y de vez en cuando tiene que buscar avivar su fe.
-
Dios no lo trajo hasta aquí para dejarlo. Lo que él empezó en su vida lo va a terminar. Quizás no vea cómo se va a resolver, pero Dios tiene una forma. Cuando cree, el creador del universo va a trabajar. Pablo dijo aquí en Gálatas 6, “No nos cansemos de hacer bien, porque a su debido tiempo cegaremos si no desmayamos. Y percibo en mi espíritu que estamos entrando al año de tiempo debido, un año en el cual Dios se notará en su vida, promesas en que se apoya, sueños por los que ora.
-
En este tiempo debido, Dios hará que las cosas caigan en su lugar. Va a ser que sucedan cosas que usted solo no podría ser que sucedieran. Problemas que ha creído que cambiarían. En su tiempo las cosas van a cambiar a su favor. Quizá ha tenido esa adicción por 20 años, se ha esforzado una y otra vez por romperla sin éxito.
-
Lo bueno es que este es su debido tiempo. Este es un año para ser libre. Quizás ha luchado en sus finanzas. Pareciera que no puede progresar. Da un paso hacia adelante y dos hacia atrás. Que esta frase penetre en su espíritu. Su tiempo debido llegó. La promoción viene, cambios buenos vienen, la escasez no es su destino, ni la continua lucha, pena sobrevivir.
-
Ese no es el final de su historia. Siga creyendo, siga esperando, siga honrando a Dios. La abundancia va hacia usted. En su tiempo debido, su copa va a rebosar. Y mire, a veces uno necesita que le hablen estas palabras de fe y victoria. Las palabras tienen poder creativo. Si las deja enraizar en su espíritu, pueden ayudarle a encender sus sueños, encender su fe, encender el potencial en su interior.
-
Su mente quizás intente dissedadirlo, no puede descifrar cómo va a suceder. Está bien. No es su trabajo. Su trabajo es creer. Su trabajo es decir, “Sí, Dios, esto es para mí hoy. Creo que es mi año de tiempo debido.” Mucha gente lucha esos días con la depresión. Es como si una nube oscura lo siguiera. No han podido dejarla en el pasado y pareciera que de esa forma va a ser siempre.