Una segunda oportunidad

Descubra el poder transformador de la gracia de Dios, definida como una segunda oportunidad continua, inmerecida e innegociable. Basado en las profundas enseñanzas del Dr. Charles Stanley de Ministerios En Contacto (extraído de la serie “La gracia: una segunda oportunidad”), este recurso explica cómo la justificación por la fe abre la entrada a un estilo de vida de gracia, liberando al creyente de la esclavitud de tratar de pagar a Dios por Su favor o pecados pasados.

El Dr. Charles Stanley afirma que Jesucristo es el único camino, la verdad y la vida, y que nadie viene al Padre sino por Él. Por tanto, el evangelio de la gracia de Dios debe ser predicado a toda criatura.

1. Entendiendo la Gracia: La Segunda Oportunidad de Dios

La gracia es lo que todos quisiéramos: la oportunidad de hacerlo otra vez. A menudo, al escudriñar nuestra vida, pensamos: “Señor, si pudiera cambiarlo, si solo pudiera tener otro chance”. Una segunda oportunidad es lo que significa la gracia.

Gracia: Favor Inmerecido y Bondad Divina

La definición más completa de gracia incluye:

• Es la bondad de Dios y Su benignidad hacia la humanidad.
• Se da sin tener en cuenta el valor o el mérito de quienes la reciben.
• Se ofrece a pesar del hecho de que no la merecemos.

La gracia es el amor inmeritorio, inmerecido e innegociable de Dios; es solo un regalo. Si se tiene que pagar algo, no es un regalo, sino un trueque. Dios no es manipulador y no negocia con nadie.

2. El Fundamento de la Gracia: Justificación por la Fe

Todos los que somos salvos hemos experimentado esta oportunidad. Esta gracia se fundamenta en dos demostraciones de la provisión de Dios: el perdón del pecado y la introducción a un estilo de vida de gracia.

La Justificación: Declaración de Inocencia

La primera demostración de la gracia es la justificación. La justificación es una declaración de Dios de que el individuo es inocente y ha sido absuelto de su culpa y pecado. A los ojos de Dios, la persona justificada es vista “como si nunca hubiera pecado”.

La justificación se recibe “por la fe”. Lo que importa no es solo creer en Dios, sino el objeto de la fe, que es Jesucristo.

La Cruz: El Único Sustituto Válido

Ni siquiera Dios podría haber dicho simplemente: “Lo arruinaste, pero está bien, te daré otro chance”. Esto se debe a Su naturaleza como Dios de justicia. La única forma en que Dios puede otorgar una segunda oportunidad es porque Alguien más tomó nuestro lugar.

• Visión Eterna de Dios: Dios puede perdonar pecados pasados sobre la base de la muerte de Su Hijo en la cruz, la cual ya era un asunto concluido en la mente de Dios.
• Sustitución: Jesucristo murió en la cruz y Su muerte sustitutiva hace posible que Dios nos dé una segunda oportunidad.
• Paz con Dios: La justificación por la fe resulta en paz para con Dios, lo que significa que “la guerra acabó” entre Dios y el individuo; ya no somos enemigos, sino hijos.

Si se elimina la cruz, no puede haber gracia, cristianismo, perdón ni vida eterna.

3. Viviendo en la Esfera de la Gracia (Estilo de Vida)

La justificación nos da entrada por la fe a esta gracia en la cual estamos firmes. Esto significa que los creyentes vivimos en una esfera de gracia.

La Esclavitud de Pagar a Dios

Un problema común es que muchos creyentes, aunque salvos por gracia, viven la mayor parte de su vida tratando de “retribuir a Dios” o “pagarle” por lo bueno que ha hecho o por los pecados que cometieron.

• Anular la Gracia: Tratar de pagarle a Dios es anular la gracia de Dios. Si se pudiera pagar, no sería gracia.
• Esclavitud: Vivir bajo la idea de que “debo pagarle” es una forma de esclavitud, impidiendo que se disfrute la vida cristiana y generando preguntas constantes sobre “cómo está mi cuenta en el cielo”.
• Culpa Erradicada: La gracia de Dios erradica la culpa pasada. Cuando Dios perdona, ya no se acuerda de los pecados nunca más.

El servicio, la devoción y el amor a Dios deben surgir de nuestra libertad en Él, no para pagarle.

La Gracia es la Única Motivación

La gracia es la motivación para vivir y amar a Dios Todopoderoso. No trabajamos para ser salvos, sino que trabajamos porque ya lo tenemos.

El Favor Inamovible

Cuando Cristo es recibido como Salvador, Dios pone la cubierta de Su favor sobre la persona.

• Base Firme: Vivimos bajo el dosel de la gracia, sobre la roca inamovible de la gracia por fe.
• Consecuencias de la Duda: Si el creyente no cree que vive en el favor de Dios, se perderá la bendición.
• Propósito de las Pruebas: Dios nunca nos maltrata ni nos patea. Si envía dificultades, pruebas y problemas, es “para purificarte y hacerte santo, hacerte como yo”.