¿Existe el infierno?

Descubra la verdad ineludible sobre el juicio futuro y la vida eterna a través del poderoso mensaje del evangelista Billy Graham. Este análisis, basado en más de 50 años de predicación global, aborda el tema difícil del infierno no con alegría, sino con un corazón quebrado, enfatizando que solo el gran amor, misericordia y gracia de Dios proporcionan un escape seguro.

Billy Graham: El Mensajero de la Verdad Bíblica

Billy Graham es reconocido entre los líderes religiosos más influyentes en la historia del mundo. Habló apasionadamente sobre la esperanza segura encontrada en Jesucristo a más de 210 millones de personas en 185 países. Graham afirmó que acepta la revelación de Dios por fe, incluso en lo que no entiende o comprende.

La predicación sobre el infierno debe ser realizada con lágrimas y respaldada por el amor, la misericordia y la gracia de Dios. Graham enfatizó que no le gustaba predicar sobre el infierno, sino que lo hacía por el mandato de las Escrituras.

1. El Diagnóstico Ineludible: La Realidad del Infierno

A pesar de su incomodidad, la existencia del infierno es una enseñanza constante de la Biblia y del propio Jesucristo.

Creencia General y Origen Divino

Una encuesta realizada en 1983 mostró que el 86% de los estadounidenses creen en la existencia del infierno.

El infierno no fue hecho para el hombre, sino que fue creado para el diablo y sus ángeles. La razón por la que algunos hombres irán allí es porque han decidido seguir al diablo y hacer lo que el diablo dice. Dios, en Su gran amor, ideó un plan para salvarnos y evitar que pasemos un solo día en ese lugar.

Jesús, el Mayor Maestro del Infierno

Nadie en las Escrituras habló más sobre el infierno que Jesús.

Jesús advirtió constantemente sobre el castigo:

• Cualquiera que lo maldiga quedará expuesto al infierno del fuego.
• El Hijo del Hombre enviará a Sus ángeles para arrancar de Su reino a todos los que pecan y hacen iniquidad, y los arrojarán al horno encendido donde habrá llanto y rechinar de dientes.
• Dirá a los que estén a Su izquierda: “Apártense de mí, al fuego eterno preparado para el diablo y sus ángeles”.

Jesús enseñó que es mejor vivir la vida con un ojo, una mano o una pierna, que ir al infierno con todo.

El Deber de Advertir

Es correcto advertir a las personas sobre lo que Jesús enseñó y lo que la Biblia enseña de principio a fin. Ignorar el juicio (el fuego, el tornado) es peligroso; es como el hombre que intentó advertir a los autos de un puente caído, pero ninguno paró, y cinco cayeron y murieron.

2. El Infierno en la Tierra: Manifestaciones Actuales del Pecado

La Biblia enseña que hay al menos tres tipos de “infierno”:

El Infierno en el Corazón

Aquí es donde comienza la mayoría de los problemas. La Biblia enseña que la naturaleza humana es básicamente mala; nacemos pecaminosos, egoístas, tercos y perdidos en el pecado, y luego elegimos pecar, volviéndonos pecadores por práctica.

• Culpa: El infierno de la culpa atormenta a las personas. Un hombre que engañaba a su esposa confesó estar viviendo un infierno.
• Maldad Repentina: El corazón humano puede llevar a las personas aparentemente buenas y refinadas a convertirse en asesinos violentos y maníacos de repente. Se citó el ejemplo de una mujer refinada que mató a su esposo mientras dormía, y ahora está en prisión.
• Inquietud: El infierno de la inquietud se manifiesta en aquellos que son como un mar agitado, corriendo por el mundo buscando descanso y paz sin saber a dónde van.
• Lujuria y Odio: El infierno de la lujuria se encuentra en la persona que se entrega al placer y ya está “muerta en vida”. La lujuria implica que si tuvieras la oportunidad, cometerías la inmoralidad. El infierno del odio estalla en guerras y disturbios.

Finalmente, el infierno futuro es una proyección del infierno que se tiene ahora en el corazón y en el mundo, salvo que “sigue y sigue” en la eternidad.

3. El Infierno Futuro: Separación y Tormento Eterno

La naturaleza esencial del infierno es la separación de Dios.

Tres Descripciones de Jesús

Jesús usó tres palabras para describir el infierno, cada una representando la pérdida de la presencia divina:

1. Muerte: Dios es vida; estar separado de Él es estar muerto espiritualmente.
2. Gran Oscuridad: Dios es luz; el infierno es separación de la luz.
3. Fuego: El fuego puede ser un fuego terrible dentro de nuestros corazones, un deseo insaciable de Dios que fue rechazado y que nunca podrá ser conocido.

La Parábola del Hombre Rico y Lázaro

La historia de Jesús sobre el hombre rico y Lázaro confirma la realidad del tormento y la separación irreversible.

• Tormento y Consuelo: El hombre rico fue sepultado en el infierno (Hades) y levantó los ojos en medio de sus tormentos. Lázaro, por otro lado, fue llevado por los ángeles para estar al lado de Abraham y es consolado.
• Gran Abismo: Hay un gran abismo entre los dos lugares, impidiendo el paso entre el paraíso y el lugar de tormento.
• Sin Segunda Oportunidad: Se indica que este hombre no tuvo una segunda oportunidad. El hombre rico se volvió “muy evangelístico” al rogar que se advirtiera a sus cinco hermanos para que no fueran a ese lugar de tormento. Sin embargo, Abraham insistió en que sus hermanos debían escuchar a Moisés y a los profetas.

El infierno es el desvanecimiento de la presencia de todo lo que es alegre, bueno, correcto y feliz.

4. El Camino al Paraíso: El Antídoto de Cristo

Graham se presentó como aquel que tiene el bote del evangelio para el que se ahoga, el pan de la vida para el hambriento, y el antídoto para el que está envenenado por el pecado.

La Seguridad de la Vida Eterna

La muerte es un suceso que cada hombre considera antinatural cuando se relaciona a sí mismo. Sin embargo, la muerte llegará pronto a todos, y estaremos en la eternidad, donde estaremos apartados de Dios o con Cristo en el paraíso.

Podemos saber que tenemos vida eterna. Pablo dijo: “estoy seguro de que tiene poder para guardar lo que le he confiado hasta aquel día”. Graham mismo afirmó: “Sé que yo iré ahí” y espera con ansias el momento en que esté más vivo de lo que jamás estuvo.

El Ladrón en la Cruz: Fe Simple

El hombre más difícil de alcanzar no es el que sabe que es pecador, sino aquel que tiene “suficiente religión” para evitar una buena dosis de salvación.

La primera persona que Jesús llevó al paraíso con Él fue un ladrón, un asesino y un hombre que merecía la pena. Él solo dijo: “Señor recuérdame cuando vengas en tu reino”. No tuvo tiempo de bautizarse ni de unirse a una iglesia, solo creyó, y Jesús le dijo: “hoy estarás conmigo en el paraíso”.